Escaparates como este han hecho las delicias de mi vista, hasta que no podía resistirlo más y debían pasar a mi estómago necesitado después de mucho recorrer París. La hora de comer es una de mis favoritas, la gente que me conoce dice que disfruta viéndome encantada paladeando cada bocado. No hace falta ningún manjar especial para deleitarme. Y aunque en París a veces el cansancio era tal que una vez en el hotel no había quien me sacara a cenar, las comidas no se perdonan...
De esta charcutería del barrio de Montmartre me traje un salchichón delicioso. El embutido francés y sus patés aparecían muy frecuentemente formando parte del menú parisino. Eso sí, el jamón, me parece a mí que como en España en ningún sitio. Indispensable una tabla de quesos, que en Francia gozan de una variedad de matices y contrastes arrebatadores.
Los crepés salados o galletes, que se elaboran con una harina diferente a los dulces, combinados con cualquier cosa y regados con sidra de la Borgoña hicieron las delicias de un par de cenas en un lugar muy acogedor muy cercano a Montmartre: Le Gavotte.
Otra de las delicias que probé es el confit de canard, si algo hay más barato que en España es el pato, os lo recomiendo.
No probé los vinos franceses, el precio se sube un pelín y con una caña de cerveza y agüita de jarra ya iba servida a mediodía... Eso sí, el último día no podía dejar de probar un aperitivo que me habían recomendado: el kir, que lleva vino blanco y un licor dulce (de mora, fresa, melocotón... según el sitio que lo prepare) y he de decir que menos mal que no lo probé el primer día, porque si no hubiera repetido irremisiblemente todos los demás, gastando unos 5 euros por copita que en ese momento no me dolieron lo más mínimo... Repetí.
También los bombones y chocolates en general son muy apreciados en París... Un par de cajas se vinieron conmigo, y aún hay que dar cuenta de una de ellas!! La bollería en general, y especialmente los croissants estaban magníficos, y también tuve ocasión de probar unas tartaletas de manzana y pasas exquisitas.
Y, para terminar, un cafetito... Aquí no puedo hablar por experiencia propia, ya que no soy nada cafetera, pero os puedo decir que vi precios desde 1'90 hasta 3 euros. Ya pueden estar buenos...
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1 comentario:
Je ne sais pas francais:
http://youtu.be/VOW5jm-S-Gc
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